Ron Howard impresiona con esta impactante cinta que nos narra la historia vivida por Niki Lauda y James Hunt interpretados por Daniel Brühl y Chris Hemsworth. Emotiva y real, así definiría una de las mejores películas que nos ha regalado este director de contrastes. Capaz de obras como esta o de películas para olvidar. Ron Howard.
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Trasladarte al mundo de la Formula 1 de los 70 es una sensación indecriptible para todo amante de este deporte, entre los que me incluyo. La emoción que debieron sentir los espectadores al disfrutar de dos de los mejores pilotos de la historia debe de ser brutal. Tampoco me puedo quejar cuando he disfrutado de pilotos como Michael Schumacher, Fernando Alonso o el incomprendido Lewis Hamilton, tres de mis favoritos.
El ascenso de Niki Lauda y James Hunt al circo de la Formula 1 y su encarnizada lucha y admiración mutua es perfectamente plasmada por Ron Howard en la pantalla. Es cierto que el principio de la película transcurre de forma un poco precipitada y no me hubiera importado unos 20-30 minutos más de cinta para profundizar en ciertos detalles, pero la narración de la historia de los mundiales de 1975 y 1976 directamente te transporta a las gradas de algunos de los circuitos más espectaculares del mundo.
Bonito contraste entre la vida sin control de James Hunt y la mente fría y calculadora de Niki Lauda y los beneficios que esto le trajo a cada uno en sus carreras. Todo irá dirigido al antes y el después del terrible accidente sufrido por Lauda en el circuito de Nurgburing y que lo tuvo pendiente e un hilo entre la vida y la muerte. Resulta realmente emotiva la superación del piloto para volver a las carreras y la difícil decisión que tuvo que tomar al verse envuelto en una nueva situación de peligro.
La interpretación de Daniel Brühl del piloto austriaco es espectacular y Chris Hemsworth se queda algo rezagado a pesar de que el papel del piloto inglés le viene como anillo al dedo. No obstante es de agradecer la presencia de ambos actores en esta película y la utilización de secundarias como Natalie Dormer y Olivia Wilde para alegrar a más de uno.
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En definitiva, una adaptación de la historia muy digna y necesaria para todo amante de la Formula 1 y el mundo del motor. Ron Howard demuestra de lo que es capaz a pesar de sus numerosos altibajos y Daniel Brühl se confirma como una gran promesa.
7,5/10